Bienvenidos a Planeta Tierra: Nuestro querido hogar y al episodio de hoy titulado Veganismo: La forma más rápida para un planeta más frío
Durante estas series, les introduciremos la información actual sobre emisiones de gases de efecto invernadero, las soluciones para un rápido enfriamiento planetario y por qué una dieta a base de plantas es la forma más rápida, más económica para reducir las emisiones y estabilizar la temperatura de la Tierra.
En el pasado, los esfuerzos para mitigar el calentamiento global se han enfocado en casi exclusivamente en bajar alas emisiones de dióxido de carbono. Pero ahora sabemos que aunque reducir el CO2 es crítico, aún si el mundo entero se cambia a una economía y estilo de vida cero carbono hoy, tomaría miles de años que este gas se disipe.
Algunos científicos y oficiales del gobierno ahora reconocen que limitar los gases de efecto invernadero de vida más corta tales como el metano y el dióxido nitroso, y sus contribuidores al calentamiento tal como el carbono negro, liberado al aire por la quema de biomasa y combustibles fósiles, pueden tener una mayor influencia en disminuir el calentamiento planetario en una cantidad corta de tiempo. Como un científico climatólogo dice, necesitamos reducir los gases de efecto invernadero de corta vida hoy con el fin de asegurar un planeta vivible para nuestros hijos, y necesitamos reducir el CO2 para asegurar un planeta vivible para las generaciones a unos cuantos cientos de años a partir de ahora.
Limitando estos gases, particularmente el metano, es relativamente económico y rápido, mientras que muchas de las tecnologías para reducir el CO2 están tanto en su infancia o son costosas y el tiempo consumido para integrarlas en la actual infraestructura.
El entendimiento científico sobre el papel de la ganadería en acelerar el calentamiento global también ha aumentado. Algunos investigadores están comenzando a reconocer que el ganado contribuye mucho más a las emisiones de gases de efecto invernadero globales que el 18 por ciento estimado por el reporte del 2006 "Larga sombra de la ganadería" de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. La demanda por carne contribuye directamente con el rápido derretimiento de la Antártida debido al carbono negro y otros contaminantes emitidos hacia la atmósfera por la crianza de ganado.
El Dr. James Hansen, uno de los prominentes científicos climáticos del mundo, recientemente dijo que si la Antártida Occidental se derrite, eso podría ser uno de los puntos de no retorno del cambio climático más aterradores del siglo 21.